Cuentos de Eva Luna

por Isabel Allende (1989)

Tengo que admitir que me fascina como escribe esta mujer. Cuentos de Eva Luna no es una novela en su totalidad, sino que es una colección de 23 cuentos pero entrelazados en un mismo hilo narrativo.

Una mujer que vende palabras, otra que se pasa casi toda una vida encerrada en un sótano, otra se convierte en una prostituta célebre, la maestra Inés que mata por venganza... y aunque al principio todo parecen historias independientes; empiezan, pasan o acaban en el pueblito de Agua Santa.

Después de leer el libro me enteré que hay una novela, titulada Eva Luna, así que si tienes la oportunidad de leerla antes de los cuentos sería mejor para así poder conocer un poco más a algunos de los personajes.

Tengo que admitir que algunos cuentos no me gustaron mucho, otros no entendí muy bien, pero la mayoría los disfruté, sobre todo por la belleza del lenguaje de Allende y sus particulares descripciones y comparaciones.

Si no has leído todavía ningún libro de ella, te sugiero que empieces por una novela.

Citas:

"Le gustaban casi todos en general y muchos en particular."

"Para ti el lenguaje es un hilo inagotable que tejes como si la vida se hiciera al contarla."

"Es cosa de ojo, tiempo y corazón."

"No podía hablarle de eso, porque una cosa lleva a la otra y se acaba diciendo lo que nunca se ha dicho."

"Las palabras morían en su garganta antes de nacer."

"Hay toda clase de historias. Algunas nacen al ser contadas, su substancia es el lenguaje y antes de que alguien las ponga en palabras son apenas una emoción, un capricho de la mente, una imagen o una intangible reminiscencia. Y otras vienen completas, como manzanas , y pueden repetirse hasta el infinito sin riesgo de alterar su sentido.Existen unas tomadas de la realidad y procesadas por la inspiración, mientras otras nacen de un instante de inspiración y se convierten en realidad al ser contadas. Y hay historias secretas que permanecen ocultas en las sombras de la memoria, son como organismos vivos, les salen raíces, tentáculos, se llenan de adherencias y parásitos y con el tiempo se transforman en materias de pesadillas. A veces, para exorcizar los demonios de un recuerdo es necesario contarlo como un cuento."