Mujeres errantes (por Pilar Sánchez Vicente) 2018El amor, la amistad, la traición, la emigración, el trabajo, la explotación, la familia, los secretos crean la historia de Greta Mier, la protagonista. El libro narra la historia de tres generaciones de mujeres que luchan durante toda su vida por avanzar pero también por huir.
Eloína, la mamá de la protagonista, le confiesa que no es su madre biológica pero no le da ninguna información más. Entonces, ésta, Greta Mier, una autora suiza con descendencia parental española, decide volver a Gijón en busca de sus orígenes en un viaje de carretera con la cenizas de su supuesta madre de copiloto en el carro. La única pista que tiene Greta para empezar a investigar es una foto vieja en la que aparecen: Eloína junto con su mamá, conocida como la Tiesa, y Julia, conocida como la Chata.
La Tiesa y la Chata son dos pescadoras ambulantes de un pequeño pueblo de Gijón, amigas inseparables hasta que un suceso las separa para siempre. La protagonista será la encargada de atisbar que este suceso es el motivo del gran secreto de la vida de Greta.
Me encanta la manera que tiene la autora de desarrollar los enlaces, haciendo saltos en el tiempo y en las historias de cada una de las tres mujeres.
Las descripciones detalladas te permiten viajar en el tiempo e imaginar la escena con exactitud.
No solamente narra la historia familiar de Greta, sino también su vida profesional como escritora, con sus éxitos y sus fracasos, así como su vida personal con las relaciones tóxicas que ha ido teniendo a lo largo de su vida.
Una vez Greta consigue encontrar a Julia en una residencia de ancianos, pero bien lúcida, se hace pasar por una periodista en busca de indagar y escribir sobre la historia de las trabajadoras migrantes en la fábrica de Nestlé -dónde se sitúa la única foto que Greta pudo obtener-.
Julia, después de creerse la trama, decide ayudarla con la creación y redacción de la historia. Bajo unos chantajes de sidra y otras comidas típicas de la región, acepta ir de paseo con ella mientras se va dando lujos culinarios y va explicando la historia, pero poco a poco y cada día...y el tiempo es una bomba de relojería para descubrir el pasado de Greta. Julia le proporciona unas cartas de su amigo y cura Guillermo, que le escribía mientras estaba de misión en Nicaragua.
Me encantó el personaje de la Chata, típica señora de pueblo sin tapujos, sufridora pero velando siempre por el bienestar de los suyos, aunque no se lo merecieran.
Me dio mucha pena terminar el libro, mientras iba leyendo sobre las diferentes localidades del libro -Nicaragua, el norte de España, Suiza, Londres-, pensaba el gran trabajo que tuvo que hacer la autora para documentarse sobre estos lugares, ya que cuyas descripciones parecían ser conocidas de primera mano.
Me sorprendió al terminar el libro encontrar un código QR con el enlace del sitio web de la autora y con audios reales.
(Aquí os lo dejo por si queréis echarle un vistazo antes de empezar a leerlo:
No dudo en recomendar este libro. Una novela muy bien documentada, en un estilo que te embauca, unos personajes que desearías conocer, y un viaje en el tiempo.